El cuarto capítulo de Diferencia y repetición es uno de los más complejos de toda la producción filosófica de Deleuze. Mi intención en este artículo es hacer una aproximación a la red de conceptos que lo componen a través de una clave de lectura: la elaboración de la noción de problema como un universal concreto. Veremos que para Deleuze la diferencia permite comprender las articulaciones del ser como devenir y del sentido como efecto. En ese marco, lo universal y lo singular se relacionan íntimamente a través del planteamiento de los problemas. El desarrollo de esta síntesis diferencial permite dar cuenta del estatuto objetivo de los problemas, en la medida en que conforman verdaderas estructuras, así como la instancia en que se generan sus actualizaciones diversas.